lunes, 7 de agosto de 2023
sábado, 20 de mayo de 2023
Árbol y yo
Escribí sobre el fenómeno de la simbiosis en la naturaleza, y algunas de sus implicaciones en lo que entendemos por vida y muerte, para el último número de la revista Velociraptors. Muchas gracias a la revista y Editorial Neptuno por esta oportunidad.
sábado, 3 de diciembre de 2022
Poemas medievales
1.
Como un rayo de sol, caliente
como un campo de trigo, dorado
el recuerdo, mi alimento
tu boca, un talismán
un anillo, la dulzura
las cadenas, el presente
un jinete se avecina
buscando su corral
de la tierra brota el fuego
y de la piedra, la tierra
De la piedra dorada como el sol naciente.
2.
Como un perro herido, que gime
como un jamelgo ardiente, que galopa
hay lugar en este mundo
para el dolor más dulce
toda aldea tiene un fin
y todo fin se escurre
amigo mío, tu boca sincera
ilumina el puente quemado
de mis dientes brota el sueño
y de la tierra, fantasía
De la tierra herida como un jinete alcanzado.
3.
Como un anillo, que me enlaza
como un lazo, que me alcanza
vos dibujas mis cadenas
con el dedo, amigo mío
la copa de un álamo escalo
para verte, tierra negra
aire fino, copa fina
hoja de plata, fina hoja
clavas tu puñal en mi tierra
brota la raíz, liberada
De la tierra liberada como un disfraz de fantasía.
4.
Como una hoja, doblegada
como un tesoro, prometido
tus palabras han llegado
y aún no llegan, mi amigo
tienes un as en tu contra
y otras cartas a favor
no todo quien galopa es mi dueño
mi dueño es un instante que no acaba
del instante brota el cosmos
y del cosmos, una aguja
Del instante perforado como el cuero nuevo.
5.
Como un carro, viejo carro
como una vieja, vieja herida
bebes de la tierra su consigna
no hay costado del camino
el sol teje un viejo abrigo
toda tierra, la perfora
vos bebes del sol el trigo
y amaneces, hoy, a mi lado
a mi lado brota el día
y del día, la locura
Del día infinito como un juego de dados.
6.
Como una parcela breve, trabajada
como un gran árbol, conocido
lo que siento no es ajeno
y se quiebra con el tiempo de la helada
donde quieras, yo te espero
tengo treguas para darte
el silencio de la siesta
puede ser un tierno castigo
de un guijarro brota la chispa
y del fondo brota el río
Del fondo huidizo como el fondo del río.
7.
Como una oveja, triste lana
como el cuero, apretado
déjame subir al carro
llévame contigo
como el sol, vas al pueblo
y el pasado ya te abriga
el camino es de polvo
y es de polvo el que camina
del caballo brota la fuerza
y de la fuerza el latigazo
De la fuerza oscura como el fondo de un aljibe.
8.
Como el agua, una estrella
como el fin, un misterio
flores de romero del campo mío
traigo para vos y tu pelo fino
vos eres mi dueño que vas delante
conoces el ruido de tu cencerro mío
con un pico y una pala
yo te busco, amado mío
de la semilla brota el trabajo
y el trabajo da sus frutos
El trabajo pegajoso como la miel entre tus panes.
9.
Como el cielo, que anochece
como la noche pasajera
repito la pregunta
que fluye al horizonte
colgado de sus tetas dulces
como un remero se cuelga del río
sobra alimento en la tierra
hasta que falta
la escasez brota de la abundancia
y la abundancia de la fruta
De la fruta absoluta como respuesta sin pregunta.
10.
Como el cuero viejo, quebradizo
como una estrella fugaz, que acontece
soy tan frágil como tu pregunta
y a tu duda me avecino
amigo mío, vos me atas
pongo el dedo en tu nudo
nos nutrimos de la tierra
y la tierra es la duda
del aire brota la lluvia
y de tu boca la pregunta
De tu boca lisa y certera como el horizonte dorado.
lunes, 29 de agosto de 2022
sábado, 2 de julio de 2022
El aborto en estados unidos
era mostrarme cómo se había hecho
tal o cual tapiz o tejido
y yo quería escucharte
pero del otro lado de la mesa
alguien hablaba sobre Roe vs Wade
intentando darle al tema
una complejidad que no tenía
y vos
Lo miraste con un lindo desprecio
le preguntaste si no había visto Dirty Dancing
“y entonces?!
Más simple que eso lo querés?!”
miércoles, 22 de junio de 2022
Verso de un poema que no encuentro
miércoles, 5 de enero de 2022
Ardillas en Buenos Aires
I think that the Root of the Wind is Water—
Emily Dickinson
Queríamos que nos contaras sobre el curso de activismo ambiental
pero como nunca contás nada
tuvimos que insistir
y nos tiraste dos o tres datos feos al azar
y ya volvías a agarrar el frasco y el picachu
Mientras tanto la ardilla
la primera que vimos en Buenos Aires
seguía a los saltitos por unos paraísos
era simpática
y vos no nos sabías explicar
por qué eso era tan malo
pero igual te creímos
Supongo que nuestros antepasados
conocían el entorno como un hecho íntimo
pero si logro desprenderme de este suspiro tótem
Nos vemo en Disney
Habíamos alquilado por el fin de semana
una supuesta quinta
que era una casa en un club de golf
donde había una laguna
con una islita en el medio
En esa isla vimos un águila
sobre un nopal
devorando una serpiente
pero ya no se fundan así las ciudades
Habíamos tomado el San Pedro
que compré en Catamarca cuando fui por laburo
y empezaba a sentir la mezcalina
Caminé descalzo por el pasto sintético
Y me cayó tu gran lamento
Me atravesó como un rayo
que vuelve a la tierra y ni se lo cuestiona
Entré en un bosquecito de pinos
de pura sombra y pinocha
y traté de imaginarme la ausencia del ego
y creo que una parte mía podía
Llegué a una fuente
rodeada de personas
porque estaba por empezar un show
de luces y música
con los chorros de la fuente sincronizados
parecía una ceremonia
toda la gente con los teléfonos levantados
le rendía tributo a esta fuente eterna
mientras una canción de Queen mal transmitida
retumbaba en los paredones de una cancha de pádel
y los paraísos no dejaban de tirar sus frutos
con olor a podrido
Capaz que una ciudad ahí se estaba gestando
con el ayer y el mañana y el ahora mismo
y el hace un ratito todo así mezclado
Mientras que las ardillas
van ganando la Pampa húmeda
y ya nada volverá a ser como antes
Para vos todo esto
es una película de terror
y bueno eso puede ser
pero no la dirige nadie
creo que en eso estamos de acuerdo
Hasta que se apague el sol tenemos para rato
unos diez mil millones de años
En tiempos de Bambi todavía es un bebé
todavía la mamá le está mostrando
hasta dónde llega el bosque y cómo es la pradera
hay dibujitos para rato
Terminé en el otro extremo del parque
en el límite del club con un alto alambrado
que daba a una calle poco iluminada
pero con mucho tránsito
A pocos metros estaban quemando basura
vi la silueta de unos linyeras recortada sobre las llamas
y me pareció que lo puro y primigenio es una idea
que queda floja y suelta en un chorro dinámico de realidad
que nada es tan importante
que esta devolución masiva de carbono al sistema
todo este desastre y la extinción masiva
y las grandes migraciones desesperadas y las pandemias
y los microplásticos en el tejido de cada organismo
y cualquier cantidad de dramas que puedan desencadenarse
es una manchita insignificante en la gran piel del bambi geológico
en la locura quise estar ahí dentro
trepé el alto alambrado
capaz que ese momento fue lindo
en proceso de domesticación
nadie pudo charlar conmigo
terminé acostado en el pasto
teniendo visiones sin abrir los ojos
de animales y piedras y huesos tallados
directo hasta el amanecer
después caminé y encontré una remisería
un señor me llevó de vuelta
para adentro del club
ustedes estaban todos dormidos
y me fui a bañar en la laguna
rodeado del canto de los zorzales
al rato llegó un guardia
como un fenómeno atmosférico
y me dijo que ahí no se podía nadar
el tipo era simpático
me convidó un cigarrillo
y me preguntó si iba a llover
viernes, 19 de noviembre de 2021
Diminutas alas doradas
A Agus Gurevich
Compramos un paquetito de yerba Piporé
que parecía de juguete
y nos morimos de amor
Por la mesa iba caminando un bichito
que tenía como unas alas doradas
y una de las alas parecía rota
Bajo el ala tenía unos puntitos rosados
en cada punto había un jardín
y en cada jardín
un cielo estrellado
Miramos las estrellas largo rato
el bichito dejó de moverse
y lo enterramos en una maceta
“En cada una de esas estrellas
puede haber un planeta
con gente como nosotros
enterrando un bicho en la terraza”
dijimos, apuntando bajo la diminuta ala dorada
Después hiciste una mini lápida
le pusiste un nombre gracioso
y la hora de su muerte
miércoles, 3 de noviembre de 2021
Camino a Lourdes
En ese viaje en tren
por el sur de Francia
(Esto pasó en 2008 ou 2008
pero lo recuerdo con buen detalle)
tuve puestos los auriculares en silencio
para escuchar discretamente la conversación
de un grupo grande de mujeres centroamericanas
que hacían una peregrinación a la virgen de Lourdes
y hablaron toda la noche en español
intercambiando anécdotas sobre partos y embarazos
Muchas cosas me conmovieron de su diálogo
pero nada como esa señora diminuta
que se inclinó un poco hacia adelante para decir:
“Mija, no piense usté en su toto
que tiene ahora bajo la enagua,
porque cuando Diosito quiere
se hace más grande que la cueva de un ferrocarril”
Pasamos por muchos túneles en ese viaje
pasajes largos y oscuros por el interior de las montañas
que no sentí como sagradas o misteriosas
sino que simplemente estaban,
se erguían estoicas bajo las estrellas
sin gran motivo, en la noche fría.
miércoles, 13 de octubre de 2021
Individual y caudaloso
Estabas furioso y te fuiste así de golpe
subiendo de dos en dos las escaleras del puente
bajo un sol exagerado
un sol de fantasía despiadado
que le daba un brillo de ensueño y fin del mundo
a las nubes de tierra pálida
que en este pueblo son conocidas
Capaz que en ese momento me odiabas
pero yo te vi
frenarte un segundo arriba del puente
y mirar el paisaje desolado de casas bajas
donde un remolino de polvo
que parecía salir de tu cabeza
se arrastraba sin ganas por las calles desiertas
sospecho que entonces me perdonabas
Hay algo de la ira que me resulta incomprensible
Un seco manantial
que brota a lo lejos de la tierra vieja
y recogemos en el pecho de inmediato
individual y caudaloso
en una copa dorada y brillante