De la trompeta un animal extraño
está siempre a punto de salir.
Pienso que si la vida me preparó para este momento
lo hizo haciendo trampa,
porque la fuerza del despliegue
es un camino sin sombra,
no hay nada adentro de la caja,
ni siquiera la otra caja
(ésta aparece casi al lado
y es igual, es la misma
pero tiene más bordes y superficies
es más difícil de abrir
y su envoltorio está más arrugado)
A la idea de la rueda
hay que sacarle la rueda y la idea
y si el fuego pudiera quemar todo el palo de una
lo haría sin pensarlo.
Una nota no se convierte
en la siguiente,
no la anticipa ni le apunta
(no tiene con qué)
y sin embargo ahí está,
ya tomó su lugar en el mundo,
no hubiera existido sin la anterior.
La figura que se expande es tonta
cree conocer sus límites
y se jacta de haberlos rebasado.
El animal gruñe al tiempo que se deja acariciar
pero sólo está entremedio de cada cosa,
es lo que hubiera sido.
Nadie le explica a la ola que va a romper,
ni se le ocurre a la ola hacerlo,
sólo lo hace.
1 comentario:
¡¡¡¡¡¡¡A la idea de la rueda hay que sacarle la rueda y la idea!!!!!!!!
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